jueves, 5 de octubre de 2017

Recuerdos de la década de 1970

Peccei, Pérez Alfonzo, Kahn

Hace unos días mi gran amigo  Andrés Duarte Vivas, Andy, me envió unas fotos que avivaron mis recuerdos. Eran de una reunión en la casa de Jorge Olavarría en Los Guayabitos, realizada  - creo – en Marzo 1977. En ellas aparecen Sofía Imber, Juan Pablo Pérez Alfonzo, Hans Neumann, el futurólogo Herman Kahn  (Fundador del Hudson Institute), Jorge, el dueño de casa, Andy  y otros. Aunque no estoy en esas fotos, si recuerdo haber estado allí y asistido al singular intercambio de opiniones entre Kahn y Pérez Alfonzo, quienes sostenían visiones bastante diferentes sobre el futuro de la humanidad.  Pérez Alfonzo, con su sombrerito, escuchaba atentamente a Kahn y, al final, le dijo: “Si ese es el mundo que existirá, no quiero estar vivo para verlo”, o algo así por el estilo.
 En retrospectiva, al ver las fotos y pensar en aquellos años, pienso que Venezuela atravesaba un verdadero mini-renacimiento intelectual. En esos años no solo nos visitó Herman Kahn sino también los portadores de una visión diferente del futuro de la humanidad, Aurelio Peccei, Dennis y Donatella Meadows, líderes del Club de Roma. Más aún, el Club de Roma celebró su reunión anual en Caracas en junio 1981, a la cual asistieron centenares de intelectuales y pensadores de todo el mundo, para discutir sobre el papel de América Latina en el futuro de la Humanidad. En esa reunión presentaron trabajos Peccei, Helio Jaiguaribe, Víctor Urquidi, Yeheskel Dror, Juan Rada, Estelio Breto Flores, Eduardo Frei, José Curiel, Rafael Caldera y otros, los cuales fueron finalmente publicados en 2010, casi 30 años después. La reunión contó con la activa participación del grupo Orinoquia A.C., cuyo presidente, José Curiel, presentó un documentado trabajo sobre la Interconexión Fluvial de América Latina.
Por su parte, Herman Kahn llegó a Venezuela invitado por el Grupo CORIMON, cuyo accionista principal y  presidente, Hans Neumann, era un gran catalizador de actividades intelectuales y pudo reunir a su alrededor a gente entusiasta como Andy Duarte y Víctor Petzall, entre otros, así como financiar actividades que iban desde esta visita de Kahn hasta el apoyo a  la extraordinaria revista RESUMEN de Jorge Olavarría, la cual también recibía ayuda de los hermanos Vollmer y de un tío de Jorge (no hubiera podido sobrevivir solo con las ventas). Debido al incansable Olavarría, RESUMEN no solo era una revista de ideas sino que promovía una actividad intelectual de alto nivel.
Las opuestas  visiones del futuro personificadas por Peccei y por Kahn en esa década se mantienen en pie hoy en día y no solo no han sido resueltas sino que se han profundizado y hoy ya han sido contagiadas por la emoción, puesto que el tiempo se nos acaba. En el planeta hay una verdadera batalla entre quienes hablan del calentamiento global y quienes lo consideran un fraude, a pesar de las evidentes manifestaciones cada vez más terribles de la naturaleza.
En esos años de 1970 el tema principal en discusión era el de los recursos, si finitos, como alegaba el Club de Roma o casi infinitos, como planteaba Kahn. Su libro “El año 2000” pronosticaba un futuro diferente al que anunciaba el Club de Roma en su libro: “Los Límites del Crecimiento”, publicado en 1972. Eran visiones llamadas en ese momento optimistas (Kahn) y pesimistas (Club de Roma) pero hoy quizás tendrían diferentes apelativos. En la Venezuela de la época Kahn fue entrevistado  nada menos que por Carlos Rangel y Sofía Imber para su programa “Buenos Días”, un programa en el cual se mostró confiado y hasta un tanto arrogante.
Poco antes de la llegada de Kahn, la visita de la gente del Club de Roma había sacudido y entusiasmado el ambiente intelectual de Caracas, conduciendo a la creación de un capítulo venezolano, en el cual participé, y la celebración en nuestra capital de su reunión anual en 1981 . Eran los años de esas grandes visiones sobre el planeta y del entonces novedoso concepto de futuros probables, no ya un pronóstico lineal sobre el futuro sino la creación de un abanico de escenarios diversos, cada uno con probabilidades asignadas y con la posibilidad de los planificadores de trabajar para concretar el más deseable. En este nuevo método de “pronosticar” el futuro Venezuela también había sido lugar de avanzada, al crear en la Shell en Caracas su primer grupo de Planificación Estratégica, solo segundo  del de Londres, un grupo que trabajaba basado en esos nuevos enfoques, el cual fue heredado por Maraven y en el cual participaron, todavía muy jóvenes, Moisés Naím y Raúl Arriaga, casi inmediatamente después de la nacionalización petrolera de Enero 1976.
Esa Venezuela de la década de 1970 hervía de talentos. El debate petrolero de 1973-1975 sacó a flote dos visiones opuestas sobre lo que debía ser la industria petrolera, si negocio internacional o símbolo nacionalista. En ese debate se enfrentaron dos grandes grupos: un amplio espectro de izquierda y hasta de derecha, cada cual tratando de ser más nacionalista que el otro, y un grupo de empresarios y tecnócratas que veían los peligros de una nacionalización a sangre y fuego, donde  lo único que se iba a nacionalizar eran “los riesgos”, ya que los beneficios estaban del lado de la Nación debido a la combinación de instrumentos legales existentes. Al final se impuso la decisión política de nacionalizar (estatizar, realmente) la industria pero el peso de la opinión de los petroleros  permitió que, casi por una década,  PDVSA se mantuviera más allá del alcance de la politiquería. Eso se acabó en Septiembre 1982, cuando Luis Herrera Campíns  le sustrajo a PDVSA su fondo de inversiones y terminó de un plumazo con su capacidad de autofinanciamiento.
En esos años de 1970 Petkoff publicó su extraordinaria obra: “Proceso a la Izquierda”. Carlos Rangel publicó su “Del Buen Salvaje al Buen Revolucionario”, una biblia para la derecha latinoamericana. En el IESA, a inicios de los 80 se publicaban maravillas, como el libro de Naím y Piñango: “Venezuela: una ilusión de armonía”.   Hasta los extremistas de izquierda, como Radamés Larrazábal y Francisco Mieres, eran estudiosos. El presidente de PDVSA era un gerente fuera de serie llamado Rafael Alfonzo Ravard, asistido por extraordinarios gerentes petroleros como Rodríguez Eraso, Sugar y  Quirós y centenares de verdaderos profesionales de la industria.  

Unos años de gran empuje intelectual, pero….
Sí. La década de 1970 fue de gran brillantez para Venezuela, pero…. ¡Cuidado! Lamentablemente, en esa época de gran actividad intelectual, cuando Venezuela parecía encaminarse hacia un primer mundo de ciudadanos, también tuvimos  a un Carlos Andrés Pérez I, con quien se inició el horrible desvío de nuestro rumbo como país, nuestra tragedia venezolana. Pérez I fue un extraño caso. Durante la primera fase de su presidencia actuó como un estadista, como un gran demócrata, aunque contaminado de la fascinación que despertó en muchos demócratas de la región el carnicero Fidel Castro. CAP tuvo sus veleidades tercermundistas, a lo Castro y a lo Chávez. Su peor error fue haber iniciado aquél mamotreto que llamó la Gran Venezuela, el uso de un ingreso petrolero que llovió del cielo para tratar de construir una Venezuela ilusoria que incluiría una CVG acromegálica y una multitud de castillos industriales en el aire. Aquello fue una caricatura en miniatura del gran Salto hacia Adelante del criminal Mao Tse Tung. Esta Gran Venezuela de CAP I inició los bandazos que el país multiplicaría después, en manos de presidentes mediocres: Herrera, Lusinchi, CAP II (siempre con destellos de grandeza, lamentablemente nunca realizados), Caldera II (tapón inmisericorde de sus sucesores naturales)  hasta llegar a su remate trágico con ayuda de  una segunda lluvia de petrodólares, la que le llegó al sátrapa Chávez, generando la abominación que se llamó  el socialismo del Siglo XXI.

Con esta nostálgica postal del pasado no deseo sugerir que todo tiempo pasado fue mejor. Ciertamente puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que el liderazgo de la Venezuela actual es muy pobre, con un régimen en manos de ignorantes, cursis, ladrones y narcos. Pero hay mucho talento, el cual – como fue el caso de la Edad Media universal – se encuentra refugiado en los centros de reflexión, en las universidades del país y del exterior, pensando en la Venezuela que vendrá después de que se haya disipado el fétor chavista. El Club de Roma está vivo y coleando en Venezuela. Historiadores como Karl Krispin y Tomás Straka siguen su valioso trabajo. La Universidad Católica es un oasis de actividad intelectual. CEDICE está allí y está dando una gran batalla. El talento venezolano no ha desaparecido, mucho está en estado latente, listo para florecer de nuevo con renovados bríos. Y así como lo está en el país, también lo está en Georgetown, en Harvard, en MIT y en las universidades de Europa.

Por todo el planeta las semillas de nuestro renacimiento intelectual están a salvo.  Ojalá que nunca más tengamos en nuestra pequeña Venezuela líderes políticos que pierdan la cabeza y se crean mesiánicos, mientras más mediocres más mesiánicos. Ojalá que tengan humildad y sensatez y no se crean líderes de una potencia mundial. Si lo hicieren se convertirían en nuevos hazmerreír, como lo fue el difunto y como lo es este risible chofer que maneja hoy un auto desvencijado con las cuatro llantas desinfladas ,pero cree estar compitiendo en Fórmula Uno.  

16 comentarios:

F J Baptista dijo...

Estimado Gustavo, leyendo éste nuevo magnífico artículo tuyo me da una gran tristeza recordar quienes fuimos y donde está Venezuela hoy.
Hombres como Rafael Alfonzo Ravard, Guillermo Rodriguez Eraso, Wolf Petzall, Hans Neumann, Juan Pablo Perez Alfonzo, Andy Duarte (el único actualmente vivo que yo sepa), y así muchos más incluido usted, fueron grandes creadores e intelectuales que crearon una visión para un país exitoso que ha ido desapareciendo y del que hoy sólo queda una carcaza. Tuve el placer de conocer a todos los arriba nombrados y con quienes a distintos niveles de confianza con quienes tuve oportunidad de relacionarme y de conversar en muchas oportunidades. Hay tantos grandes venezolanos y extranjeros que fueron parte de la creación de una Venezuela, aunque lejos de ser perfecta, con grandes posibilidades de futuro y prosperidad.
Pensar que ése legado se ha perdido, que muchos que se educaron bajos los preceptos y la guía de éstos señores, han salido del país y con una alta probabilidad que nunca regresarán o que se han retirado. Que sus valores y métodos de trabajo responsable, producto de una preparación y experiencia de años de actividad profesional no serán conocidos ni aprendidos por generaciones futuras, es un crimen cuyos responsables son los corruptos, traidores y mediocres que hoy están llevando al país a un fracaso inevitable y dantesco. Venezuela tardará décadas en regresar a ser lo que fue, si tenemos suerte.

Gustavo dijo...

Gracias Federico. Solo el tiempo dira que clase de pais sera Venezuela. Nuestros deseos no seran suficientes si no hay vigor ciudadano.

Jack McDowell dijo...

Me gusta mucho lo que cuenta, Gustavo. Lamento también tantas cosas que pudimos ser y no fuimos, como el cuento bonito ese que Vd cuenta acá de la joven Rosalinda que era tan bella pero tan bella que no pudo desposarse (La FPO) o el cuento aquel que de cuando CAP lo iba a nombrar a presidir el Seguro Social y se salvó de vaina de echarse ese tremendo carro encima. El problema con Venezuela en este momento creo yo que es que los que se quedaron estan retejodidos porque en ese entorno civilizar a millones de malandros acostumbrados a que les echen las migajas y ellos alli felices rodeados de carajitos viendo ese espectaculo es como cuando Vd le permite a su suegro echarse en su sala y empezar a cambiar el televisor, echarse gases y quitarse la camisa mientras lo ve a Ud echandole bola de sol a sol para tratar de pagar la quota de la casa al banco si es suya o el alquiler al dueño del inmueble y que la casa más o menos ande limpia y ordenada. Haga lo que haga ya dejo que el suegro se instalara, él está esperando que Ud haga lo jodido y él espere la comida a la hora que la sirvan... y cómo lo saca sin divorciarse? El suegro es ese gentio esperando que le caiga la migaja y la esposa es Venezuela. Vd esta bien jodido si cree que siendo arrechisimo en lo que hace va a salir airoso de ese encuentro entre la miseria y el conformismo. Cómo se divorcia de su país? Emigrando pal coño. Me temo, Gustavo, que el que no se dio cuenta de esto a tiempo, 2002-2009 y no puso pies en polvorosa se retejodio. Ya es tarde. No nos llamemos a engaño. Con Karl Krispin me une una amistad de años, es mi amigo y donde lo vea le voy a dar un abrazo, pero qué va, en Venezuela ser un intelectual es un estigma, no vale la pena. En Venezuela no. El pueblo jamás te va ver con buenos ojos para que dirijas un carajo. Siempre serás su enemigo porque tú tienes cultura, clase y muchos conocimientos. Ahora, métete a militar, sé grosero, irrespeta a tu mujer y goza una bola bailando y cantando y verás que todos te votan y te veneran como si fueras el Messi de Miraflores. Y en el inter, aprovecha y sales con alguna burrada, como conjugar Adquirir y decir y escribir Adquerir en una pizarrita con tu ministro de Educación sentadito en una especie de escuelita donde tú eres el maestro. Los venezolanos te amarán.

Gustavo Coronel dijo...

Una visión deprimente, Jack, pero con muchas verdades. Esa sociedad mediocre que mencionas puede ser transformada en materia de una a dos generaciones mediante un programa sistemático y perseverante de educación ciudadan, llevado a cabo por nuevos gobiernos honestos y conscientes de su deber hacia el país. Imposible? No. F-Difícil? Si. Se necesita un liderazgo nuevo. Existe ese liderazgo? No se, creo que sí y podrá emerger de la nueva generación de venezolanos, tantos los que se han ido como los que se han quedado, cada quien por sus razones respetables.
Chávez, Maduro, los militares ignorantes, los pedrocarreños y dariovivas de este siglo XXI son una pesadilla de la cual podemos despertar.

Anónimo dijo...

Ahora resulta que el libro de Petkoff es extraordinario y el de Rangel solo la biblia de la "derecha" latinoamericana. Mire pues. La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida.

Gustavo Coronel dijo...

Cuando digo que el libro de Rangel es la biblia de la derecha latinoamericana lo hago como un reconocimiento, como un gran cumplido a quien fue el gran paladín de la derecha a la cual yo pertenezco.
Este anónimo luce ignorante al pensar que "derecha" es un término peyorativo. A eso ha llevado la cobardía política venezolana, que piensa que solo el izquierdismo es progresista, cuando - en realidad - con frecuencia es todo lo contario. No debemos avergonzarnos de ser de derecha.
Eso por el lado de mi admirado Carlos Rangel. Por el lado de Petkoff ese libro sobre socialismo marcó su separación de la ideología absurda del comunismo, de la izquierda que él llamó borbónica, la que ni aprende ni olvida. Creo que este anónimo no tiene idea de lo que representó el libro de Petkoff para los demócratas latinoamericanos. En ese libro Petkoff rompió con las tiranías socialistas-comunistas.

Anónimo dijo...

Gracias por lo de ignorante y por la aclaratoria, que casi no necesitaba pues no soy yo quien considera peyorativo el término, como Ud. señala en su repuesta y yo rstifico, sino todos o casi todos los políticos quienes se han dejado imponer esa connotación, y quienes nunca reconocen ser de derecha; incluso Caldera llegó a decir que Copei es un partido de centro "que mira hacia la izquierda". En cuanto a Petkoff, bueno, para mí siempre tuvo su corazoncito rojo, cómo lo demostró, sólo por poner un ejemplo, cuando expresó que "Chávez es un demócrata". Creo que este `político, a quien Ud. evidentemente admira, está sobrevalorado.

Gustavo Coronel dijo...

En este mismo blog he criticado duramente a Petkoff por haberse megado a considerar a Chávez como un dictador. Sdimro al petkoff de los años 70 y, también, admiro su labor en Tal Cual. Si pienso que nunca pudo arrancarse del corazón esa tendencia izquierdizante, según la cual las dictaduras son unicamente de derecha, nunca de izquierda. En mi blog he escrito mucho sobre el sesgo izquierdizante de los políticos venezolanos.
Ver: http://cedice.org.ve/soy-de-derecha/ y ver también: http://lasarmasdecoronel.blogspot.com/2017/03/reflexionessobre-la-izquierda-y-la.html sobre este tema.
Muchos saludos y perdone mi agresiva respuesta anterior, pero me dolió su comentario.

Anónimo dijo...

Y yo me disculpo snceramente con Ud. pues mi primer comentario fue injustamente venenoso y provoca su respuesta que, como indica, fue dolida. Admiro su humildad y sigo como fiel lector. Saludos.

Jack McDowell dijo...

Ahora es que vengo conetándome al blog por problemas múltiples pero es importante mencionar también que hay que reconocerle a Petkoff que cuando perdió la nominación a candidato presidencial en 1973 en su propio partido no se fue a fundar otro como hizo el viejo Caldera, sino que más bien trabajó por el que eligieron, que no es otro sino la rata de alcantarilla que llaman Jose V Rangel. En la historia del mundo, poquisimos fundadores de partidos han hecho eso, aceptar su derrota y trabajar por el que sus fieles votaron. En su libro "Checoslovaquia, el socialismo como problema" le da durisimo al comunismo y tan es asi que Brezhnev lo mando a excomulgar. Igualmente, Gustavo y anonimo "venenoso", es importante ver que Teodoro en ese libro prácticamente predice la caída del muro de Berlín y el triunfo del sistema económico de libres mercados. No sé, creo yo, que fue el primer autor de corte socialista que lo hizo.

Anónimo dijo...

Sobre lo que dice McDowell, voy a intervenir en esta derivación que han tomado los comentarios. En realidad, la barbarie del estalinismo, y del comunismo en general, es muy anterior a 1968 y Checoslovaquia. Si no bastaba el horror de las hambrunas y el Gulag en la URSS y de las locuras de Mao con el gran salto adelante, ya en 1956 los rusos invadieron Hungría, hechos que una intelectualidad alcahueta e izquierdista en USA y Europa ocultó descaradamente. Cuando se produjo la revolución comunista cubana ya la verdad del socialismo-comunismo era conocida, pues aunque no se vivía la explosión de la comunicación y la actual globalización, SÍ había suficiente información como para que el comunismo no tuviera partidarios. Los intelectuales y políticos de izquierda guardaron silencio cómplice y oportunista. Lo de Petkoff, entonces, me lleva a esta pregunta: ¿mérito de ser el primero o tarde piaste pajarito? (y si somos estrictos, el mérito le corresponde a Orwell, ex-socialista quien escribió 1984 y rebelión en la granja, pero no nos pongamos a hilar tan fino)

Jack McDowell dijo...

Ciertamente.

Jack McDowell dijo...

Otro que adivinó en qué pararía la cosa fue Carlos Rangel quien en su libro DBSABR se adelanta 40 años y prevee a Chávez (militarismo autoritario) y a la casta comunista (órbita cubana y soviética) arruinando el ya muy poco posible proyecto concreto de un país serio con instituciones serias y un ambiente propicio para el avance del libre mercado cómo fue lo que ocurrió finalmente en diciembre de 1998 con la subida al poder del demagogo de Sabaneta, adivinado por Rangel décadas antes. La única persona que en este momento puede encarar sin miedo a que le digan nada el problema venezolano porque lo advirtió y luchó para que Chávez no subiera al poder fue el ilustre Henrique Salas Römer quien hace poco en una entrevista con el periodista peruano Jaime Bayly dijo varias verdades a tenor de que la dirigencia actual opositora está desconectada de la realidad como vemos esta sucediendo. Cómo es posible que el que supuestamente es el economista jefe del proyecto antichavista diga que hay que remarcar los billeticos?

Jack McDowell dijo...

Es un poco lo que escribí arriba, en un país serio Carlos Rangel hubiera sido presidente. Pero en Venezuela poner a Chávez de presidente fue el sueño dorado de una cuerda de sinvergüenzas que ya ven como tienen el país porque esto de ahora es consecuencia de Chávez . Maduro es un mercenario que puso Castro para llevar la tienda hasta que le provoque al polit buró cubano porque ya no creo que exista un Pinochet que en 1973 en Chile dijo Cubanos o muertos o idos, uds deciden. Éso era un hombre.

Voy a contar una anécdota personal. Tengo una familia humilde pero con casa propia y empleo durante la IV. Al llegar las elecciones de 1998 felices fueron a votar por Chávez. Les dije será un error y se molestaron al punto de gritarme. Siempre fue un vehículo de envidia el que yo pudiera vivir acomodado gracias a un par de buenas inversiones y ellos querían también una casa más grande y vivir cómodos sin pasar por el trabajo de hacer capital y que este generará renta/plusvalía. Ayer me pidieron 50 dólares porque no tienen nada para comer y no les alcanza la pensión. Ése es el común denominador en Venezuela te envidio porque tú tienes y yo no y no importa si te lo ganaste yo me lo merezco porque soy pobre. Esa envidia fue la que explotó Chávez y le rindió convertir a Venezuela en la burdeleria castrista. Qué país sale adelante así?

Anónimo dijo...

Jack, a mi un universitario, en la puerta de una institucion cuando le dije "Chavez es comunista", me expreso "no vale, el comunismo se acabo". Aunque nuncs supe si el amigo voto por el tirano no solo fueron los pobres, sino mucha clase media la que nos echo esta tremenda vaina. Otro amigo, miembro de mesa, me dijo que en Cumbres de Curumo gano Chavez.
De acuerdo con la importancia señalada acerca de Rangel y su obra.

Jack McDowell dijo...

Si. Hubo mucho clase media. Y Otero del Nacional y Pino Iturrieta, Valentina Quintero, Inés Quintero, etc etc etc